Fabio Risso Pino: Del amor y el devenir.

            Pocos momentos después de entrar en la Galería Braga Menendez (Buenos Aires), nos encontramos con el montaje de la exposición que se estrenará el próximo martes 13 de marzo. Me entusiasma, descubrir personas-lugares-temas; y hoy me encontré a un artista que realmente me gustó, así de simple. Yo no soy ni crítica de arte, ni especialista en “nothing”. A mí me gusta mirar, y si lo que me gusta me gusta, pues me gusta.

Su obra “El Devenir” es lúdica y sentimental. Una hipótesis sobre cuatro momentos en la pérdida del amor, claramente refleja su creencia de la existencia tras la existencia. Dibuja parte de su vida sin temor a exponerla, y eso me agrada. Me caen bien los artistas que son espontáneos, que responden preguntas sin pensarlo tanto, sin poses “intelectualoides”.

Personalmente fue inevitable sentir en sus cuadros al principito, sí, el de Saint-Exupéry, el de la boa que se come un elefante donde los demás sólo ven un sombrero, me emocionó descubrir que es parte importante de su influencia. También lo es Los árboles mueren de pie, la emoción, la ternura y el drama se percibe en los particulares cuadros de Risso Pino. ¿Mi favorito? El elefante empuja-ayuda-lleva al otro elefante hacia el umbral, ese desconocido espacio al que se va quien ya no coexiste en el mismo espacio, nos dibuja la muerte desde un escenario casicurador. Para mirar a Risso Pino hay que mirar como un niño, uno de esos que aunque hemos crecido, aún permanece en nosotros, bien dentro, esa hermosa capacidad de seguir creyendo y de tener fe en la transformación profunda del dolor en arte, o en expresión.

Están cordialmente invitados.