DMK: Una familia lúdica.


Depeche Mode Kids


Probablemente, en el mundo, no exista un padre que pueda tener la absoluta certeza de hacer las cosas de manera correcta. Puedo suponer, porque aún no soy madre, que siempre existirá la duda, y la pregunta de si se está haciendo lo correcto. Creo firmemente que el único método posible para cuidar la infancia de nuestros hijos es el amor, y de esto además de música y realización audiovisual, Dicken Schrader, parece tener una buena dosis. Nos reunimos vía skype con tres miembros de la familia, el popular trío que se ha expandido por el planeta a través de sus videos versionando a Depeche Mode.  Carolina la madre de los chicos se encuentra de viaje, así que Dicken asume muy bien el papel de padre que debe cuidar de las tareas de Milah (8 años) y de Korben (5 años).


Milah aparece peinada con unas trenzas que reflejan su inocencia y su dulzura, Korben en una pijama de Mario Bross, frente al ordenador; ambos miran la cara que se dibuja frente a ellos con un toque de timidez y seriedad, al principio. Aunque en los últimos meses han estado expuestos a la prensa nacional e internacional, mantienen esa naturalidad genuina de la infancia y sonríen sólo cuando realmente quieren sonreír. La música, la moda y el arte son ingredientes naturales de éste hermoso núcleo familiar. Los videos que podemos disfrutar de ésta particular agrupación provienen de la larga experiencia en el campo audiovisual de Dicken Schrader, quien estudió y se graduó Magna Cum Lauden en Florida International University convirtiéndose en un apasionado de lo audiovisual. En su currículo podemos encontrar marcas destacadas como MTV y VH1. En Miami se conoce con la que madre de sus hijos: Carolina D’Lacoste (venezolana de nacimiento, oriunda de Maracaibo), quien se dedica al ámbito del diseño de indumentaria y producción de moda.


La música es un juego en el que los dos hijos y su padre se encuentran y fortalecen un vínculo fraternal. Dicken cuida de sus hijos, bajo el manto del cariño, la creatividad y el afecto, procura protegerlos de la sobreexposición que han tenido en los últimos meses, para que su infancia continúe con un ritmo natural y estos particulares episodios sean una muestra positiva de creatividad mientras se divierten, la pasan bien y aprenden de la música. En sus vidas, un giro inesperado surgió cuando el video donde versionan Everything Counts superó el millón de visitas, y mientras avanzan en su desarrollo artístico con sus ya conocidas “versiones video musicales”, la intención de Dicken es que los chicos se conviertan en protagonistas y el padre vaya cobrando un rol “secundario”.

Photography by Ricardo José León Jatem for Yositomofoto.
Wardrobe and Make-up by María Carolina D'Lacoste
Ese proyecto no parte de una idea de comercialización, al contrario, sólo surge de la posibilidad de compartir un gusto en el que padre e hijos se encuentran para divertirse, tanto como lo hacen cuando diseñan maravillosos muñecos de cartón inspirados en la famosa serie animada de Bob Esponja, y tantos capítulos que vivirán en lo profundo de su intimidad como familia, que nosotros no queremos invadir. La sensibilidad y necesidad de Dicken de compartir los simbólicos encuentros con sus hijos son apenas una pequeña parte de todo lo que realizan como familia.

No puedo imaginar lo divertido, lúdico y maravilloso que puede ser tener un entorno familiar artístico en el que día a día desarrollan ideas que se convierten en una metáfora absoluta de una gran relación. El arte durante la infancia de Dicken siempre estuvo presente, y aunque, siendo hijo único y teniendo un padre que se desarrollaba profundamente como artista, quizás habría querido pasar más tiempo en su infancia junto a él, hoy en día es parte de su inspiración y de su magnífica relación con “el abuelo Schrader”.
De aquí viene la transformación, evitar que tu carrera profesional te aleje de la posibilidad de pasar más tiempo con tus hijos fue una emoción que Dicken transmutó y lo llevó, ignorante de ello,  a un grandioso resultado: Transmitir su pasión y su profesión a su entorno familiar, creando maravillosas versiones de Depeche Mode.

Hay emociones que se abren en cada entrevista que realizo, eso es algo a lo que siempre me gusta llegar, porque siento que cuando entrevistado – entrevistador, conversan desde el corazón, puedes descubrir mucho más que esa faceta artística que se percibe a través de una obra determinada.. Descubrir un ser humano que se preocupa por cuidar, enseñar y aprender de sus hijos, es una experiencia maravillosa, que refleja, inevitablemente, a un padre que lejos de buscar popularidad, creó un espacio en el que todas sus pasiones se integran sin bifurcar su esencia amorosa.Son músicos, son creativos, son lúdicos, son divertidos, son DMK, pero ante todo: son una familia que integra la felicidad y el amor como ingredientes principales de su crecimiento. Mi deseo: Que existan más Dickens, más Carolinas, más Milahs y más Korbens en el mundo.

Creo, desde mi humilde punto de vista, que el aporte cultural, creativo y la siembra de valores familiares, haría de nuestras pequeñas grandes casas, espacios más profundos en los que podemos disfrutar de creaciones, que transmiten la felicidad de ser familia combinada de manera natural con tu campo profesional. 

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